Langreo lideró la caída de los precios de vivienda libre en Asturias en el primer trimestre del año, con una disminución del 13,8 por ciento. Esta bajada ligada a la crisis del ladrillo es dos puntos superior a la experimentada en Gijón y Avilés, y está casi cuatro puntos por encima del descenso de los precios constatados en Mieres. Según la estadística elaborada por el Ministerio de Vivienda, que incluye a los municipios con más de 25.000 habitantes, el coste medio del metro cuadrado en el concejo cabecera de la comarca del Nalón es de 1.157 euros, 186 euros menos que en el primer trimestre del pasado ejercicio. La cifra consolida a Langreo como el municipio con la vivienda libre más asequible de la cornisa cantábrica.
Justo por detrás de Langreo se sitúa Mieres, en donde el metro cuadrado de vivienda libre alcanzó en los primeros tres meses del año los 1.350 euros, 139 menos que en el mismo período de 2008, con una reducción porcentual de 9,3 puntos. La bajada de los precios en el concejo del Caudal fue dos puntos inferior a la que se produjo en Avilés y Gijón, en donde el metro cuadrado alcanza los 1.639 y los 1.944 euros, respectivamente. Oviedo y Siero son los otros dos concejos asturianos incluidos en la tabla del Ministerio de Vivienda. En ambos casos la bajada del coste de la vivienda libre fue mucho más contenida, con una caída del 2,4 por ciento en el caso de Siero y del 1,1 por ciento en el caso de la capital del Principado.
Las constructoras coinciden en que los precios asequibles y la mejora de las comunicaciones suponen un notable atractivo para las promociones residenciales en Langreo que, sin embargo, experimentan el mismo parón que sufre todo el sector inmobiliario a nivel global. En este escenario, son las viviendas protegidas las que contribuyen a mover el mercado. «Está todo muy parado porque la gente está un poco a la expectativa, a ver qué pasa. Lo que se está vendiendo son viviendas de protección», explica un constructor langreano, para quien la bajada de los precios se ciñe a la segunda mano: «La vivienda de nueva planta no puede bajar los precios porque a nosotros nos suben los costes de personal y de materiales».
La responsable de otra constructora langreana asegura que, pese a que los precios en Langreo son más asequibles que en otras zonas, el mercado «está muy parado, no sólo aquí sino en Gijón y en Oviedo». A juicio de esta promotora y pese al parón actual, los habitantes de las Cuencas tienen «más facilidades» para hacer frente a la adquisición de una vivienda. «No sólo es que los pisos sean más baratos. También tienen un respaldo familiar mayor para hipotecarse porque las rentas son altas por las prejubilaciones».
Fuente: http://www.lne.es
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